Las plantas en macetas tienen solo mucho suelo para trabajar, lo que significa que necesitan ser fertilizadas. Esto también significa, desafortunadamente, que los minerales adicionales no absorbidos en el fertilizante permanecen en el suelo, lo que puede conducir a una acumulación desagradable que puede dañar su planta. Afortunadamente, hay un proceso fácil para deshacerse de esta acumulación, llamada lixiviación. Las plantas de interior deben lixiviarse regularmente para mantener su suelo despejado. Sigue leyendo para aprender más sobre cómo lixiviar una planta de interior.
Razones para lixiviar las plantas de interior
Los minerales de los que te estás deshaciendo se llaman sales. Se disolvieron en agua y se dejaron atrás cuando el agua se evaporó. Puede verlos en una acumulación blanca en la superficie del suelo de su planta o alrededor de los agujeros de drenaje de la maceta. Esto es evidencia de que hay aún más sales en el suelo.
A medida que estas sales se acumulan, las plantas tienen más dificultades para extraer agua. Esto puede provocar hojas doradas, marchitas o perdidas y un crecimiento más lento. Si se acumulan demasiadas sales, la planta extraerá la humedad de sus propias puntas de raíz y morirá. Por esta razón, saber cómo lixiviar una planta de interior es importante para su salud general.
Consejos para lixiviar sal del suelo
La lixiviación de las plantas de interior parece intimidante, pero no es necesario. De hecho, lixiviar sal del suelo es fácil. Si ve una acumulación blanca visible en la superficie del suelo, retírela suavemente, teniendo cuidado de no quitar más de ¼ de pulgada de tierra.
Luego, saque la planta al exterior o póngala en un fregadero o bañera, en cualquier lugar donde pueda vaciar mucha agua en abundancia. Luego, vierta lentamente agua tibia sobre el suelo, asegurándose de que no se desborde en el borde de la olla. Vierta el doble de agua que el recipiente de la planta. Por ejemplo, para una olla de medio galón, vierta lentamente un galón de agua.
El agua absorberá las sales y se las llevará. Lixiviar las plantas de interior cada cuatro a seis meses hará que el suelo transparente y las plantas sanas.