¿Alguna vez tuvo uno de esos días en que se siente un poco lento e hinchado? Bueno, sus plantas pueden tener el mismo problema: retienen agua como lo hacen las personas cuando las condiciones no son las adecuadas. El edema en las plantas no es una enfermedad grave y no es un síntoma de una infestación de bacterias, virus o insectos. Las causas comunes del edema de la planta incluyen riego excesivo y fertilización inadecuada; es fácilmente curable si se detecta temprano.
¿Qué es edema?
El edema, o edema, es un tipo de retención anormal de agua en las plantas, a menudo influenciado por el entorno de la planta. Las condiciones favorables en realidad fomentan el edema en muchos casos, ya que las plantas afectadas ya tienen una buena cantidad de agua en sus sistemas, proporcionándoles más puede animarlos a ingerir líquidos. Cada vez que la planta absorbe agua más rápido de lo que transmite, el edema se convierte en un riesgo.
Los signos de la enfermedad de la planta del edema varían entre especies susceptibles, pero a menudo incluyen bultos, ampollas o áreas empapadas de agua en la parte inferior de las hojas. Estas áreas pueden expandirse y volverse corchosas, pero en otras plantas, el curling y la distorsión son comunes. Se pueden formar erupciones blancas y con costra a lo largo de las venas de las hojas o estructuras similares a agallas debajo de las hojas con manchas amarillas correspondientes en la superficie superior de la hoja.
Tratamiento de Edema
Debido a que no es una enfermedad, existen muchas formas de tratar el edema, según la causa. Su trabajo como jardinero es descubrir qué está causando el problema de su planta y corregir la situación. Si su planta tiene edema, primero ajuste sus hábitos de riego. La mayoría de las plantas nunca deben sentarse en el agua, por lo tanto, retire esos platillos y asegúrese de que las ollas grandes estén drenando bien.
Las raíces tienden a absorber agua más rápidamente cuando el agua está caliente y la atmósfera es fresca, por lo que debe esperar a que el agua se ponga en sol por la mañana siempre que sea posible. En el interior, la humedad puede tener una influencia considerable sobre el edema; mejorar la circulación de aire alrededor de las plantas ayudará a reducir la humedad a rangos más seguros.
Aumentar la intensidad de la luz es útil para muchas plantas con edema, pero asegúrese de no cocinarlas moviéndolas demasiado rápido hacia una luz más brillante. Realice estos cambios gradualmente, en el transcurso de una semana o dos, dejando la planta lentamente en una luz más brillante durante un período de tiempo creciente, hasta que ya no se marchite en respuesta al sol.
Por último, asegúrese de estar fertilizando su planta correctamente. Las plantas con bajo potasio y calcio disponibles pueden ser más susceptibles a edema. Si las condiciones culturales parecen correctas para su planta, puede ser necesaria una prueba de suelo. Ajustar el pH puede hacer que haya más nutrientes disponibles, o puede que necesite agregar más nutrientes que faltan.