¿Qué es el carbón activado? Utilizado en muchas aplicaciones comerciales, industriales y domésticas, el carbón activado es carbón que se ha tratado con oxígeno, lo que crea un material fino y poroso. Los millones de poros minúsculos funcionan como una esponja que puede absorber ciertas toxinas. El uso de carbón activado en el compost y el suelo del jardín es una forma efectiva de neutralizar ciertos químicos, ya que la sustancia puede absorber hasta 200 veces su propio peso. También puede ayudar a contener los aromas desagradables, incluido el abono oloroso.
¿Se puede compostar el carbón vegetal?
Muchos contenedores y cubos comerciales de compost vienen con un filtro de carbón activado en la tapa, que ayuda a neutralizar los olores. Como regla general, el carbón activado y hortícola se puede incorporar de forma segura al compost, y pequeñas cantidades ayudarán a neutralizar los olores desagradables.
Sin embargo, el carbón de las briquetas de barbacoa o las cenizas de carbón de su chimenea en compost se debe usar con moderación, ya que demasiado puede elevar el nivel de pH del compost más allá del nivel deseado de 6.8 a 7.0.
Usando carbón activado en compost
En general, debe limitar el uso de carbón activado a aproximadamente una taza de carbón por cada metro cuadrado de compost. Una advertencia: si usa briquetas comerciales, lea la etiqueta y no agregue briquetas a su jardín si el producto contiene líquido más ligero u otros productos químicos que hacen que las briquetas sean más fáciles de encender.
Carbón de leña hortícola vs. carbón activado
El carbón hortícola tiene muchas cualidades positivas pero, a diferencia del carbón activado, el carbón hortícola no tiene bolsas de aire esponjosas, por lo que carece de la capacidad de absorber olores o toxinas. Sin embargo, el carbón de leña hortícola es un material liviano que puede mejorar el suelo pobre mejorando el drenaje y aumentando las capacidades de retención de humedad del suelo. También puede reducir la lixiviación de nutrientes del suelo. Use carbón vegetal en pequeñas cantidades: no más de una parte de carbón a nueve partes de tierra o mezcla para macetas.