Las margaritas Shasta son hermosas margaritas perennes que producen flores blancas de 3 pulgadas de ancho con centros amarillos. Si los trata bien, deberían florecer abundantemente durante todo el verano. Si bien se ven geniales en los bordes del jardín, las margaritas shasta cultivadas en contenedores son fáciles de cuidar y muy versátiles. Sigue leyendo para aprender más sobre cómo cultivar margaritas shasta en contenedores.
Plantas Shasta cultivadas en contenedores
¿Pueden las margaritas shasta crecer en macetas? Ciertamente pueden. De hecho, están bien adaptados a la vida útil del contenedor, siempre y cuando no los deje secar o enraizar.
Al plantar shasta daisy en contenedores, asegúrese de que su maceta tenga un drenaje adecuado, pero evite la terracota. No quieres que las raíces de tu planta se queden en el agua, pero tampoco quieres que se filtre demasiado rápido. Elija un recipiente de plástico o vidrio esmaltado que tenga al menos 12 pulgadas de profundidad.
Cómo cultivar margaritas Shasta en contenedores
Plantéelos en un suelo para macetas multiuso. Las margaritas shasta cultivadas en contenedores prefieren el sol completo, pero también tolerarán la sombra parcial.
El cuidado de las plantas de shasta daisy en macetas es fácil, siempre y cuando las mantengas húmedas y podadas. Riegue regularmente cuando la capa superior del suelo se sienta seca.
Retire las flores a medida que se desvanecen para dar paso a un nuevo crecimiento. En el otoño, después de la primera helada, pode la planta a la mitad de su tamaño.
Las margaritas Shasta son resistentes de las zonas USDA 5-9, por lo que las plantas cultivadas en contenedor pueden ser resistentes a la zona 7. Si vives en un área más fría, debes pasar el invierno en un garaje o sótano sin calefacción y regarlo solo ligeramente.
Cada 3 o 4 años en la primavera, debe dividir su planta de margarita Shasta para evitar que se enrede en la raíz. Simplemente quite la planta de la maceta, sacuda el exceso de suciedad y use un cuchillo de sierra para cortar el cepellón en cuatro pedazos iguales, cada uno con un crecimiento superior. Plante cada sección en una olla nueva y déjelas crecer como de costumbre.