Una cebolla con pudrición blanda bacteriana es un desastre blando y marrón, y no es algo que quieras comer. Esta infección puede controlarse e incluso evitarse por completo con buenos cuidados y prácticas culturales, pero una vez que vea los signos de la misma, el tratamiento no es efectivo.
¿Qué es Onion Soft Rot?
La pudrición blanda en cebollas es una enfermedad común causada por varios tipos de bacterias. Con mayor frecuencia afecta a las cebollas mientras se almacenan, pero la contaminación o el daño que conduce a la contaminación a menudo ocurre durante o alrededor de la cosecha. La enfermedad puede causar mucha destrucción y disminuir significativamente los rendimientos.
Las infecciones bacterianas de pudrición blanda atacan a las cebollas ya maduras. Los signos de la pudrición blanda de la cebolla comienzan con suavidad en el cuello del bulbo. A medida que la infección se cuela, la cebolla aparecerá empapada de agua. Entonces, una o más escamas en el bulbo se volverán suaves y marrones. Si exprimes una bombilla infectada, emitirá una sustancia acuosa y apestosa.
Cómo se propaga la cebolla blanda bacteriana
Las cebollas se infectan con bacterias de pudrición blanda a través del suelo, el agua y los restos de plantas infectadas. La infección entra en los bulbos a través de heridas y daños. La infección es más probable que arraigue en condiciones cálidas y húmedas.
Cualquier daño a las hojas o bulbos puede provocar la infección, incluidos el granizo y la lluvia, el daño solar, la congelación, hematomas y cortar la parte superior de los bulbos durante la cosecha. El daño mientras la bombilla todavía está en el suelo, y después de que se ha cosechado, puede provocar una infección.
Una plaga llamada gusano de la cebolla también puede propagar la enfermedad entre las plantas.
Manejando la podredumbre blanda en cebollas
Una vez que la enfermedad se ha establecido, no hay tratamiento que salve una bombilla, aunque tiende a infectar solo una o dos escalas. Sin embargo, puedes evitar las infecciones de varias maneras:
- Evite regar en exceso sus plantas de cebolla, especialmente cuando está caliente.
- Asegúrate de que tus cebollas estén plantadas en un suelo que drene bien y que les des espacio para que fluya el aire y se sequen entre riego.
- Evite dañar toda la planta mientras se desarrolla la bombilla.
- Maneje las bombillas cosechadas suavemente para evitar hematomas y otros tipos de daños que pueden provocar infecciones durante el almacenamiento.
- Asegúrese de que la cebolla esté completamente madura antes de cosecharla; cuanto más secas están las partes superiores, más protegida está la bombilla de la infección.
- Si tus cebollas se dañan, como después de una gran tormenta, puedes rociar las áreas dañadas con un aerosol a base de cobre para protegerte contra las infecciones.