Agapanthus, también llamada Lily of the Nile, es una planta nativa perenne de floración atractiva en el sur de África. La planta es fácil de cuidar y, a menudo, libre de enfermedades, pero algunos problemas de agapantos pueden ser devastadores. Sigue leyendo para aprender más sobre las enfermedades del agapanthus y tratar las enfermedades de las plantas de agapantos.
Problemas de Agapanthus
La primera orden del día cuando se trata de enfermedades de agapantos es la autoprotección. Agapanthus tiene una savia tóxica que puede irritar la piel. Siempre use guantes, mangas largas y gafas cuando corte tallos de agapantos.
Las enfermedades que afectan al agapanthus a menudo se producen por exceso de agua y demasiada humedad.
Molde gris
El moho gris es un hongo antiestético que se propaga en las flores moribundas. El molde necesita agua estancada para crecer, así que evítelo regando su agapanthus desde abajo y espaciando sus plantas para permitir una buena circulación de aire. Si ya tiene moho, elimine las partes afectadas de la planta y rocíe las partes sanas a fondo con aceite de neem.
Antracnosis
La antracnosis es otra de las enfermedades del agapanthus que se propaga a través del agua. Provoca manchas en las hojas de color amarillo o marrón y caída final, y se puede tratar de la misma manera que el moho gris.
Putrefacción
La podredumbre de la raíz y la podredumbre de la raíz son problemas de agapantos que comienzan bajo tierra. Se muestran sobre el suelo en hojas amarillas, marchitas y plantas a veces atrofiadas. Si cavas las plantas, verás que las raíces o el bulbo se descomponen y se decoloran.
Si una de sus plantas está infectada con podredumbre de raíz o bulbo, no se puede guardar. Lo único que puede hacer es descartarlo para evitar que la enfermedad se propague a otras plantas. Primero, corte el follaje a nivel del suelo y séllelo en una bolsa de plástico. Excave alrededor de las raíces y sáquelas del suelo, eliminando la mayor cantidad posible de tierra alrededor de ellas. Selle las raíces en una bolsa de plástico y tírelo junto con el follaje. Cubre el lugar con una capa gruesa de mantillo: esto mantendrá el sol alejado de las raíces restantes y las matará.