La enfermedad de Sumatra es un problema grave que afecta a los árboles de clavo de olor, particularmente en Indonesia. Causa muerte regresiva de hojas y ramas y, finalmente, matará al árbol. Continúe leyendo para obtener más información sobre los síntomas de la enfermedad de Sumatra en el árbol de clavo y cómo manejar y tratar el clavo de olor con la enfermedad de Sumatra.
¿Qué es la enfermedad de clavo de Sumatra?
La enfermedad de Sumatra es causada por la bacteria Ralstonia syzygii . Su único huésped es el clavo de olor ( Syzygium aromaticum ). Tiende a afectar a los árboles más viejos y grandes que tienen al menos diez años de edad y 28 pies (8, 5 m) de altura.
Los primeros síntomas de la enfermedad incluyen muerte regresiva de hojas y ramas, generalmente comenzando con un crecimiento más antiguo. Las hojas muertas pueden caer del árbol, o pueden perder su color y permanecer en su lugar, dando al árbol una apariencia quemada o arrugada. Los tallos afectados también pueden caer, lo que hace que la forma general del árbol sea dentada o irregular. A veces, esta muerte regresiva afecta solo un lado del árbol.
Las raíces pueden comenzar a descomponerse, y pueden aparecer rayas grises o marrones en los tallos más nuevos. Eventualmente, todo el árbol morirá. Esto suele tardar entre 6 meses y 3 años en suceder.
Combatiendo la enfermedad del clavo de Sumatra
¿Qué se puede hacer para tratar el clavo de olor con la enfermedad de Sumatra? Algunos estudios han demostrado que la inoculación de antibióticos con clavos de olor antes de que aparezcan los síntomas puede tener un efecto positivo, ralentizando la aparición de los síntomas y prolongando la vida productiva de los árboles. Sin embargo, esto causa quemaduras en las hojas y retraso en el crecimiento de los botones florales.
Desafortunadamente, la aplicación de antibióticos no cura la enfermedad. Como la bacteria se transmite por el insecto Hindola spp., El control insecticida puede ayudar a prevenir la propagación de la enfermedad. Sin embargo, la bacteria se propaga fácilmente con muy pocos vectores de insectos, por lo que el insecticida no es en absoluto una solución completamente efectiva.