Los árboles Hemlock son los Ferraris del mundo de hoja perenne: estos elegantes y caídos árboles y arbustos son magníficas adiciones al paisaje, pero requieren condiciones muy exigentes para que les vaya bien. Al igual que otras cosas bellas y delicadas, si logras que los abetos prosperen en tu paisaje, serás la envidia de tus vecinos; pero una cicuta con mala salud solo hará que su casa se vea triste y agotada. Si estás considerando plantar una cicuta en tu jardín como un árbol de especímenes o para un seto único, sigue leyendo para obtener más información sobre el cuidado del árbol de cicuta.
Paisajismo con Hemlocks
El crecimiento de los árboles de cicuta es pan comido, siempre que tenga en cuenta sus muchas necesidades al plantarlos. La pregunta no es tanto cómo plantar un árbol de cicuta como dónde plantarlos. A diferencia de muchos otros árboles grandes, las hemlocks han evolucionado mientras crecían a la sombra de otros árboles, por lo que tendrás que elegir un lugar que esté protegido, especialmente contra los vientos invernales y el calor del verano.
Hemlocks puede tolerar una amplia gama de condiciones de iluminación, pero no tolerará los suelos secos o compactados en absoluto. Aunque hay muchos abetos para elegir entre los jardineros en zonas de rusticidad de planta USDA 3 a 7, muchos cultivares solo salen bien en una parte más pequeña de ese rango, así que lea la etiqueta de guardería cuidadosamente antes de traer su cicuta a casa.
Cuidado de los árboles Hemlock
Una vez establecido, los abetos requieren poco cuidado, pero establecerlos puede ser un desafío. Necesitan suelos ácidos que permanezcan húmedos, pero no mojados, y riegos frecuentes. Al igual que los sauces, los abetos son ribereños, por lo que si su sitio está elevado y seco, es posible que deba agregar un anillo grueso de mantillo sobre la zona de raíces de su árbol y considere instalar un sistema de riego por goteo para que su árbol luzca mejor.
Las raíces poco profundas de la cicuta pueden permitir que se derrita fácilmente; si los vientos fuertes son un problema frecuente, se debe considerar una estaca estabilizadora mientras la cicuta es joven.
Aunque la cicuta no está molestada por las plagas o enfermedades como regla, tienen una plaga que parece encontrarlos donde sea que vayan. El áfido de cicuta es un insecto pequeño parecido a un áfido que se esconde dentro de un saco de lana, la plaga más notoria y problemática de las cicutas.
Las inspecciones regulares de su cicuta ayudarán a evitar daños graves de esta plaga, siempre que los revise al menos una vez al año. Octubre es el mejor momento para tratar estas plagas, ya sea con jabón insecticida o aceite hortícola. Imidacloprid a veces se usa como un tratamiento anual donde los adelgids son una amenaza constante.
La poda ocasional de los árboles de cicuta puede ser necesaria cuando hay problemas climáticos u otros daños.