Si ha notado espuma espumosa que se filtra desde su árbol, es probable que se haya visto afectada por el flujo alcohólico. Si bien no existe un tratamiento real para la enfermedad, prevenir el flujo de alcohol puede ser su única opción para evitar futuros brotes. Sigue leyendo para obtener más información sobre el flujo espumoso.
¿Qué es el flujo alcohólico?
El flujo alcohólico es una enfermedad relacionada con el estrés que afecta la goma dulce, el roble, el olmo y el sauce. Por lo general, ocurre después de un período de clima muy caluroso y seco. La enfermedad es causada por un microorganismo que fermenta la savia que se filtra o sangra por las grietas y heridas en la corteza. El resultado es un exudado blanco y espumoso que tiene un olor dulce y fermentador similar al de la cerveza.
El flujo alcohólico a veces se llama flujo espumoso o cancro espumoso debido al exudado blanco que se ve y se siente como malvaviscos derretidos. Afortunadamente, este limo solo dura un corto tiempo en verano.
Frothy Flux Información y Prevención
Cualquier cosa que promueva la buena salud general del árbol ayuda a prevenir el flujo alcohólico. Por lo general, los síntomas ocurren después de un período de clima extremadamente cálido y seco, por lo que se debe regar profundamente durante los períodos de sequía. Aplique el agua lentamente para fomentar la absorción a una profundidad de 18 a 24 pulgadas. Riegue toda el área bajo el dosel del árbol y cubra la zona de la raíz con mulch para reducir la evaporación del agua y mantener frescas las raíces.
Un buen programa anual de fertilización ayuda a mantener los árboles saludables y capaces de resistir enfermedades. Para los árboles maduros, esto significa al menos una alimentación al año, por lo general al final del invierno o principios de la primavera cuando las hojas comienzan a brotar. Los árboles jóvenes se benefician de dos o tres alimentaciones más pequeñas durante la primavera y el verano.
Las heridas y grietas en la corteza hacen que sea más fácil para el microorganismo entrar al árbol. Además, debe podar las extremidades dañadas y enfermas hasta el cuello. Use alcohol, una solución de lejía al 10 por ciento o un desinfectante doméstico para limpiar las herramientas de poda entre los cortes para que sus herramientas no propaguen la enfermedad a otras partes del árbol.
Tenga cuidado al usar una recortadora de hilo alrededor del árbol, y corte la hierba para que los escombros se alejen del árbol en lugar de hacerlo hacia el borde para evitar que se astillen en la corteza.
Tratamiento de flujo alcohólico
Desafortunadamente, no existe un tratamiento efectivo de flujo alcohólico, pero los síntomas solo duran un tiempo breve en un árbol saludable. En casos severos, la capa de madera debajo de la corteza puede volverse podrida y blanda. Si el árbol no se recupera adecuadamente, se debe cortar.