Por Nikki Tilley
(Autor de The Bulb-o-licious Garden)
La enfermedad del agujero de tiro, que también se conoce como tizón de Coryneum, es un problema grave en muchos árboles frutales. Se ve con mayor frecuencia en los árboles de melocotón, nectarina, albaricoque y ciruelo, pero también puede afectar a las almendras y ciruelos. Algunos árboles ornamentales en flor también pueden verse afectados. Dado que se puede hacer muy poco para controlar los hongos en los hoyos una vez que los árboles han sido infectados, la prevención es esencial en el tratamiento de la enfermedad de los hoyos.
Signos del hongo del agujero de tiro
La enfermedad del orificio de tiro prospera en condiciones húmedas, especialmente durante periodos húmedos prolongados. La enfermedad es más notable en la primavera, ya que el nuevo crecimiento es más susceptible. El hongo del agujero de tiro comúnmente pasa el invierno dentro de los brotes infectados, así como las lesiones en ramitas, donde las esporas pueden prosperar durante varios meses. Por lo tanto, es importante inspeccionar minuciosamente los árboles después de la caída de hojas para detectar cualquier síntoma.
La mayoría de los signos de la enfermedad de hoyos ocurre en la primavera, causando manchas (o lesiones) en los brotes nuevos y en las hojas jóvenes y los brotes. Las yemas tendrán una apariencia barnizada y las manchas se verán primero de color rojizo o marrón púrpura y aproximadamente ¼ de pulgada de diámetro. Eventualmente, estas manchas se vuelven más grandes, se vuelven marrones y se caen, dando la apariencia de agujeros de disparo en el follaje. A medida que avanza, las hojas caerán. El estrés también afecta la capacidad del árbol para producir, y cualquier fruta que se desarrolle generalmente se verá afectada también con manchas en la superficie superior que incluso pueden volverse ásperas.
Tratamiento de la enfermedad de Shot Hole
Las infecciones pueden ocurrir en cualquier momento entre el otoño y la primavera, pero por lo general es más grave después de inviernos húmedos. Las lluvias prolongadas de primavera también pueden fomentar esta enfermedad, ya que las esporas se propagan por la lluvia. El riego excesivo también puede contribuir a la enfermedad.
Un buen saneamiento es la clave para tratar la enfermedad del agujero de tiro de forma natural. Esta es la forma más segura de evitar que la enfermedad regrese. Todos los brotes, flores, frutos y ramitas infectados deben ser eliminados y destruidos rápidamente. Las hojas contaminadas alrededor y debajo del árbol también deben eliminarse.
Es aconsejable aplicar un spray latente - Burdeos o fungicida de cobre fijo - a fines del otoño, siguiendo cuidadosamente las instrucciones de la etiqueta. Estos aerosoles no deben aplicarse en primavera una vez que aparece un nuevo crecimiento, pero es posible que se necesiten aplicaciones adicionales durante el clima húmedo.